Día 1: Casco Histórico y Ciudad Vieja

Empieza tu aventura uruguaya en la Avenida 18 de Julio, el corazón comercial de Montevideo. Camina por sus tiendas y saborea un buen desayuno en uno de sus cafés. Luego, visita el Obelisco de Montevideo, un homenaje a los constituyentes de 1830.

A mediodía, dirígete a la icónica Plaza Independencia, el kilómetro cero de la ciudad. Aquí puedes admirar el Palacio Estévez, la Torre Ejecutiva y el hermoso Palacio Salvo. No te puedes perder una visita al Teatro Solís, uno de los teatros más antiguos y prestigiosos de América Latina.

Por la tarde, explora la Ciudad Vieja. Pasea por la Peatonal Sarandí, visita la Plaza Matriz, el Cabildo y la Catedral Metropolitana. Termina el día en el Mercado del Puerto, donde podrás degustar la gastronomía local y probar el famoso ‘medio y medio’.

Día 2: La Rambla y Barrios Emblemáticos

Comienza el día con un paseo por la Rambla, la extensa costanera de Montevideo que ofrece vistas espectaculares del Río de la Plata. Después, visita el Parque Rodó, un pulmón verde con un lago, museos y galerías.

A mediodía, dirígete a Punta Carretas para ver el Faro de Montevideo y disfrutar de su oferta gastronómica. Luego, relájate en la Playa de Pocitos, ideal para deportes y gastronomía.

Por la tarde, explora el barrio del Buceo y visita el World Trade Center de Montevideo. Finaliza el día en Carrasco, un lujoso barrio con hermosas casas y una rambla costanera.

Día 3: Mirador, Estadio y El Prado

Empieza la mañana en el Mirador Panorámico del edificio de la Intendencia, ubicado en el piso 22, para obtener una vista completa de la ciudad. Luego, visita el Estadio Centenario, la cuna del fútbol uruguayo, y su museo.

Al mediodía, explora el Palacio Legislativo, un impresionante edificio neoclásico. Por la tarde, dirígete al barrio de El Prado, conocido como el pulmón de Montevideo. Aquí podrás visitar el Parque Prado y el Museo de Bellas Artes Juan Manuel Blanes.

Día 4: Playas y Alrededores

En tu último día, comienza en la Playa Ramírez, situada en el Parque Rodó. Es perfecta para deportes de playa y cuenta con un parque de diversiones. Luego, vuelve a la Playa de Pocitos para disfrutar de su amplio espacio y oleaje tranquilo.

A mediodía, visita la Playa Malvín, más alejada del centro y conocida por su arena fina y oleaje más fuerte. Por la tarde, relájate en la Playa Verde, un lugar tranquilo y perfecto para escapar del bullicio.

Montevideo ofrece una combinación de historia, cultura y naturaleza que hará de tu visita una experiencia inolvidable. ¡Disfruta de tu viaje!